Si, como nosotros, estás preocupado por tu salud y la del planeta, una alimentación sostenible es fundamental. Comer proteína vegetal o de grillo en lugar de proteína animal es uno de los hábitos que nos gustaría transmitirte, así que ¡sigue leyendo este artículo si quieres cuidar tu cuerpo tanto como cuidas tu planeta!

1. Proteína animal: un peligro para el planeta.

Según la FAO (Organización para la Alimentación y la Agricultura), el consumo de proteínas animales debería aumentar un 70% para alimentar a toda la población de aquí a 2050. Mientras que en los países desarrollados el consumo de proteínas animales se está desacelerando, el de los países en desarrollo sigue aumentando, en detrimento de del planeta. Desde 1967, las cifras de aumento de la producción mundial se han disparado: +700% para la carne de ave, +350% para los huevos, +290% para la carne de cerdo, +200% para la carne de oveja y cabra, y +180% para la carne de vacuno y la leche. . El impacto de una ganadería tan intensiva no deja de tener consecuencias. La producción ganadera acapara el 70% de las tierras cultivables, y el 40% de los cereales cultivados se destinan a la alimentación del ganado que ocupa estas tierras. Para asegurar la creciente demanda de proteína animal, es necesario aumentar la producción de cereales sin tener en cuenta la fertilidad del suelo ni el respeto a su ecosistema. Por supuesto, el agua es fundamental para alimentar esta tierra. Para que te hagas una idea, la huella hídrica es una unidad de medida virtual que cuantifica el agua necesaria para producir un alimento. Entre 1996 y 2005, la huella hídrica de la humanidad fue de 9.087 billones de metros cúbicos. Debes saber que el 92% de esta agua se utilizó para la ganadería.

Este consumo excesivo no puede mantenerse a largo plazo y hay que revertir la tendencia. ¡Se debe preferir la proteína sostenible!

2. Proteínas vegetales: para deportistas veganos, ¡pero no sólo!

Cada vez hay más pruebas de que las dietas basadas en plantas son más sostenibles que las dietas basadas en animales porque utilizan menos recursos naturales y son menos contaminantes. Las dietas herbívoras también ofrecen muchos beneficios para el rendimiento deportivo, razón por la cual tantos atletas de resistencia adoptan este estilo de vida. Una dieta basada en plantas es quizás la forma más eficaz de reducir la huella de carbono del planeta. Incluso si no quieres adoptar una dieta exclusivamente vegetal, priorizar las proteínas vegetales en lugar de las animales cuando practicas deporte ya es un gran paso para ti y, sobre todo, para el planeta.

En promedio, la producción de proteínas animales requiere 11 veces más energía fósil que las proteínas vegetales para consumo humano. Además, una dieta omnívora requiere 2,9 veces más agua, 2,5 veces más energía primaria, 13 veces más fertilizantes y 1,4 veces más pesticidas que una dieta vegetariana. Incluso la tierra necesaria para producir proteína animal es de 6 a 17 veces mayor que la necesaria para producir proteína de soja.

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3. Proteína de grillo, ¡el futuro de la proteína ecológica!

El grillo es lo que llamamos: ¡un súper alimento! Es rico en proteínas completas con todos los aminoácidos esenciales y tiene un alto contenido en calcio, hierro, omega 3 y vitamina B12. Además de ser rico en nutrientes, el grillo es eco-responsable. De hecho, la producción de polvo de grillo requiere menos recursos que la proteína de la leche y genera menos residuos. Si bien la producción de carne y productos lácteos representa sólo el 37% del consumo mundial de proteínas, utiliza el 83% de las tierras agrícolas del mundo y produce el 60% de las emisiones de gases de efecto invernadero de la agricultura. En comparación, ¡la cría de grillos produce 100 veces menos gases de efecto invernadero que la cría de carne de vacuno! Echa un vistazo a este gráfico: